miércoles, 9 de noviembre de 2011



Y tal vez me canse, me acabe de aburrir,por las noches vacías y esta melancolía barata que llega hasta tus pulmones sin saber muy bien por qué. Quizá me duela demasiado los brazos como para seguir sujetando una carga tan pesada. Siempre supe que el no era como los demás. Que sus ojos siempre acababan por traicionarme. Que llore siempre sin saber el motivo, cuando toneladas de recuerdos caían sobre mi espalda. Que nunca estube segura de nada, ni siquiera de mi misma. Que era experta en correr detrás de aquellos que ni siquiera volvían la vista atrás para mirarme. Que disfrute la compañía hasta que la pena me volvía a enquistar otra vez aquí, muy cerca de donde tus manos intentaban perderse de nuevo. Aún así, querer se me daba bien, aunque no fuese a plazo fijo, nadie dijo que en esta vida las cosas tuvieran que tener la etiqueta del “para siempre”. Pero eso sí, nunca me atrevía a mirar al frente, el futuro era como una mancha negra que prometía devorarlo todo, hasta el último resquicio de felicidad que a veces coloreaba mis mejillas. Hasta la última sonrisa que me robó aquel desconocido una tarde de viernes, hace ya tanto tiempo. Su mundo está lleno de vidas paralelas, pero nunca supe cómo encajar en la de los demás, o cómo interpretar bien su papel. No te lo tomes como algo personal, quizá el viento cambie de dirección y me sacuda tanto por dentro que acabe por querer quedarme aquí, con un mensaje de buenas noches entre mis manos ..

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